El gobernador del estado de Puebla, Alejandro Armenta Mier, reveló que la delincuencia se fortaleció en la entidad durante los últimos siete años debido a la inestabilidad política generada por la sucesión de ocho gobernadores en un solo sexenio, la protección a grupos de huachicoleros y la designación de candidatos con presuntos vínculos delictivos desde el Instituto Electoral del Estado (IEE).
Esta información fue corroborada recientemente por el secretario de Seguridad Pública estatal, vicealmirante Francisco Sánchez González, quien reveló que entre los grupos criminales que operan en Puebla está La Familia Michoacana, el Cártel de Sinaloa y La Barredora.
Protección a huachicoleros y debilidad institucional
Durante una conferencia de prensa, Armenta señaló que en gestiones previas se otorgó protección a bandas locales de robo de combustible, posicionando a Puebla como el estado con mayor incidencia en este delito a nivel nacional.
Denunció que incluso el exdirector de la Policía Judicial encubría a quienes saqueaban los ductos de hidrocarburos.
«No hay que olvidar que en Puebla se protegía a los huachicoleros y pasó a ser el primer lugar nacional en robo de hidrocarburos. El exdirector de la Policía Judicial protegió a quienes saqueaban los ductos, pero eso no sucede ahora, ni a nivel estatal ni federal», afirmó el gobernador.
Armenta también reveló que, antes de asumir su cargo el 14 de diciembre pasado, comenzó a participar en las mesas de seguridad por invitación del exgobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina.
Durante estas sesiones, detectó que de cada 10 solicitudes de órdenes de cateo presentadas por la Fiscalía General del Estado (FGE), el Poder Judicial solo concedía dos o tres. En contraste, aseguró que actualmente la tasa de aprobación ha aumentado hasta el 90 por ciento.
Además, entregó un diagnóstico detallado en materia de seguridad a la secretaria de Gobernación federal, Rosa Icela Velázquez, con quien sostuvo una reunión en la Ciudad de México el pasado miércoles.
En dicho informe, el mandatario dijo que explicó a la Segob que a la falta de continuidad en la estrategia de seguridad, producto de la rotación constante de gobernadores, permitió el avance de los grupos delictivos en la entidad.
«Esos grupos avanzaron en siete años. Mientras los mandos de seguridad se iban cambiando, los delincuentes no se eligen por tres o seis años, algunos permanecen mucho más tiempo», subrayó.
La seguridad, prioridad para el desarrollo de Puebla
Ante este panorama, Armenta reiteró que la seguridad es la prioridad de su gobierno para garantizar el desarrollo económico, social y turístico de Puebla. Destacó que la Secretaría de Seguridad Pública estatal está a cargo de un alto mando de la Secretaría de Marina (Semar), lo que refuerza la estrategia de combate a la delincuencia.
«Por ello, en Puebla habrá cero tolerancia a la impunidad y a cualquier acto fuera de la ley», sentenció el gobernador, asegurando que las estrategias de seguridad se analizan diariamente en las mesas de seguridad.
En cuanto a la divulgación de información sobre la situación delictiva en el estado, Armenta precisó que, por razones estratégicas, no se harán públicos los «mapas de calor» de inseguridad ni la ubicación de los generadores de violencia. «Claro que sabemos dónde están y quiénes son, y estamos combatiéndolos», afirmó.
El gobernador también reveló que su antecesor dejó una carpeta con información detallada sobre la situación de seguridad y la operación del crimen organizado en el estado, lo que permitió agilizar las primeras acciones de su administración.
Como resultado de estos esfuerzos, destacó el reciente desmantelamiento de dos narcolaboratorios en la zona limítrofe con Tlaxcala, lo que refleja el trabajo coordinado para debilitar las estructuras criminales en Puebla.
«Para nosotros, la seguridad es lo más importante. Sin seguridad, no hay desarrollo ni tranquilidad en la población”, sostuvo.